jueves, 25 de noviembre de 2010

Kike limones… en, Lagrimas de la lluvia.

Kike se caracterizaba por sufrir demasiado. No conozco una persona más sufrida como él. En el amor, en la salud, en la suerte, etc.

Por lo general las cosas se las tomaba demasiado en serio. Al decir cosas es decir pues, todo. Eso no era la excepción con las mujeres. Cuando se enamoraba lo hacía a tal grado que el amor lejos que lo curara de muchos males, empeoraba su salud a madres.

Siempre había una excusa para todo en cuestión de salud. Ya no se cogía a tal vieja por que le pedía el divorcio de la oficial. No se cogía a x vieja por que le hacía daño con su enorme verga. Ya no se cogía a mentada vieja porque era solo un gallo que tenia. La realidad, por el corrían muchas lagrimas de la lluvia.

Había una vez un lindo conejito blanco. Era la adoración de los hijos de kike. Cierto día, un sobrino de kike por accidente termino matándolo. Se supone según información de Kike limones, ese conejo ya tenía en la familia 5 años. Los niños crecieron con él y era su mascota favorita dentro de las que tenían.

El conejito, murió. Fue tanto el llanto de los niños de Kike que al verse muy publico el asunto el asimilo esa situación para beneficio propio. El beneficio era de que el tenia una excusa para sentirse triste. La realidad, era que él estaba roto del corazón ante una nalga que se le había ido y de la cual estaba sumamente enamorado, o vacio. Cada vez que hablaba con la chica, para rogarle o simplemente discutir, después de la llamada se le llenaba de tristeza su rostro y ante la raza expresaba su sentimiento por el conejito recién muerto días atrás. Es decir, cuando lloraba por la chica sacaba la excusa de la muerte del conejito.

Pobre conejito, realmente le lloraron a madres.

Por su trabajo y al no saber llevar una vida sana tanto laboralmente como social, un día a Kike limones le dio un aviso de infarto. Pasaron las semanas y estaba totalmente recuperado. Cierto día ya recuperado del asunto, ante la raza le dio un infarto. Estos se alarmaron pero al cabo de unos momentos los alentaba a que no pasaba nada, que ya se le había pasado. Cada vez que dejaba de llamar por teléfono, se tocaba el corazón y en pleno dolor por el mismo se echaba a llorar. No era más que la excusa por llorar por la vieja y no apenarse ante la raza.

Así era kike limones. Uno de los casos más complicados de psicología que me ha tocado conocer. Claro, son cosas que realmente ni siquiera he empezado a platicar. Sin lugar a dudas es el personaje más emblemático de todas las temporadas del Desahogo del Chavo, superando por mucho al Puños.