Era una tarde más de Carne y alcohol. Algunos ya estaban pasados, como Juan Carnes y Kike Limones. Quizás por ser el centro de atención o no sé, a Juan Carnes se le salió decir que había soñado con Kike Limones.
Carnes.- Compare… Compare!!! A que no me va a creer que soñé contigo ayer.
Risas.
La raza a la expectativa se enfoco en lo que vendría. Todo el mundo sabía que algo tenía que salir de ese sueño.
Kike.- Haber haber como? Que me soñaste?
Carnes.- Si pero no me han de creer como estuvo el sueño.
Chavo.- Saca.
Carnes.- No pues resulta que iba rumbo a mi camioneta, en eso me habla kike y volteo. Pos no me creerán que el guey me enseño la riata. Me decía “¡Mira compadre!!” Y dije “hayyyyyy guey” Que me culeo y me subo devolada a la camioneta.
Risas.
Kike.- Jaajajaj ¿A ver compadre como estuvo?
Juan Carnes repitió lo mismo una vez más. La raza no daba crédito a lo que escuchaba y tiraban chingos de mierda que se empezó a incomodar Juan Carnes.
Después de mucho tiempo seguía el carro. Hasta opte por hacerlos a los dos que se abrazaran.
Carnes.- Pos no tiene nada de malo Chavo. ¿Apoco tu nunca has soñado con la verga de otro guey?
Chavo.- No guey no mames. Igual y si si, no estoy pendejo como para decirlo.
El carro se postergo por más de una hora.
Chavo.- Mira te paso que por falta de cachondeo sueñes con una vieja, a menos de que quieras o se te antoje o tengas curiosidad sueñas con un pelado, pero ya ahí sí puede haber pedos.
Carnes.- Es que no tiene nada de malo guey, fue solo un sueño.
Chavo.- Si, pero los sueños se pueden hacer realidad.
En eso de tanto hablar del asunto Esteban se puso medio inquieto.
Chavo.- Por ejemplo, de tanto pensar hasta se te antoja. Ahí está Esteban, disimuladamente se está agarrando la verga.
Risas.